Si analizamos con detenimiento las tramas de los films frecuentemente podemos ver proyectadas (de manera más o menos inconsciente por el autor) una común estructura psicológica, modo de relación y vivencias, que se recrean a través de los distintos personajes, que en gran parte se complementan o reflejan distintos rasgos o facetas de un estilo afectivo común y de personalidad.
Eso es lo que vamos a intentar mostrar a través del análisis de “ The Big Bang Theory”, la original, popular y divertida serie de televisión. El título de la serie nos viene a describir el marco intelectual en el que se mueven sus principales protagonistas, cuatro chicos jóvenes; todos son grandes científicos en el campo de la Física, la Astrofísica, Ingeniería Espacial… etc, con distintas funciones; podríamos decir que se complementan, en ese área de estudio de por si atípica; que visto desde fuera y unido a otras de sus extravagancias les hace aparecer como “de otro planeta” realmente. “The Big Bang Theory” es también una teoría sobre el origen del universo, al igual que ellos se acercan al mundo desde lo intelectual, intentan explicarlo y buscar un orden y estabilidad.
Parecen por lo tanto desenvolverse muy bien en el manejo intelectual de la realidad pero mostrando en cambio dificultades para el manejo de los afectos, llegando incluso a una total negación, control y represión afectiva, como vemos en el caso de Sheldon Cooper. Su torpeza emocional es tal, que en ocasiones es incapaz de mostrar empatía hacia los demás, lo que le hace aparecer como un Asperger, no correspondiendo sin embargo su problemática con este trastorno, ya que en gran parte de los momentos si que es capaz de mostrar empatía, de relacionarse y su falta de afectos es sólo superficial. Vendría a escenificar en cambio un trastorno obsesivo compulsivo, muy extremo eso sí.
Lo que tienen en común todos los chicos es una dependencia materna no del todo resuelta, que se manifiesta de distintos modos en cada uno de ellos, aunque también comparten aspectos comunes que les une en su amistad.
Se muestran como viviendo en un eterno mundo infantil, refugiados en sus fantasías de superhéroes y otros juegos infantiles que les compensan frente a sus inconvenientes para enfrentarse al mundo real. Así es constante su dificultad para entablar relaciones con las chicas o comportarse de forma independiente en otros aspectos. La relación entre ellos es también de mucha dependencia, así como con la vecina, Penny, una camarera aspirante a actriz que los encandila desde el principio con su dulzura y su belleza, así como sus atributos maternales, de hecho se comporta en gran medida con ellos como una madre.
El carácter histérico de Penny, con su emotividad, y facilidad de trato social, contrasta con el de los chicos y les complementa, aunque no se parezcan en nada en otros aspectos, como el intelectual y otros intereses.
Parece ser Penny un elemento importante y reparador para nuestros personajes pues a lo largo de la serie mejoran en sus dificultades.
Los rasgos distintivos de los chicos evidencian varias formas de manifestarse en la personalidad esa dependencia materna. Así Sheldon se caracteriza por la defensividad, rigidez y represión extrema como modo de hacer frente a sus impulsos y la culpa, cristalizado en un trastorno obsesivo que casi roza lo psicótico. En lo superficial su conducta expresa un control desorbitado sobre la realidad y los demás, a través de constantes actos compulsivos, así como sus múltiples manías y obsesiones. También es extrema su dependencia de los demás, a pesar de su aparente indiferencia. Sobre todo de su madre, de quien dicen ser la “Orgonita de Sheldon”, que le quita todo el poder a nuestro superhéroe como a Superman, en su omnipotencia narcisista.
Los síntomas de los demás son más moderados, Leonard parece el más equilibrado de todos (en apariencia) al adoptar el rol de cuidador frente a Sheldon, casi como una madre: lo lleva al médico, lo soporta en todas sus manías, lo cuida cuando está enfermo… etc
Aunque debajo esconde un gran complejo de inferioridad debido a que su madre, Psiquiatra, nunca estuvo satisfecho con sus logros, además de haber dificultado su individuación desde niño, no respetando su necesaria intimidad, haciendo con él más el papel de Psiquiatra que de madre, quien por otro lado se comportara de forma muy fría con él.
Todos se sienten además de por sus peculiaridades, excluidos del mundo y ansiosos por formar parte de él. Como en el caso de Amy, la excéntrica novia de Sheldon.
Howard otro de los personajes, es judío y se muestra como el más atrevido de todos, y grosero también, con un toque perverso, no oculta su promiscuidad lanzándose a cada oportunidad de conquista sexual indiscriminadamente, parece que vive literalmente anclado al pasado en su apariencia y modo de vida, sigue viviendo con su madre dominante que lo trata como si tuviera cinco años. Avanzando la serie consigue mantener una relación con una chica que en lo dominante y la forma de gritarle parece el “vivo retrato de su madre”, aunque es un progreso frente a la situación anterior.
Rajesh, el otro chico, es un inmigrante indio bien agraciado pero con un síntoma que le impide relacionarse con chicas, y es que es incapaz de articular palabra cuando esta con una mujer, inducimos que debido a sus sentimientos inconscientes de culpa motivado también por esa dependencia materna. A parte de esto se muestra como un chico de lo más tierno, un tanto tímido y excéntrico, que espanta a las chicas con su comportamiento. Aunque en los últimos capítulos consigue superar su mutismo y tener novia. Finalmente todo evoluciona en el vivir y su inevitable movimiento.
La figura materna está constantemente presente en todo el relato pero ¿y la paterna?: la generalidad es su ausencia (como suele suceder en estos casos), bien por su falta real o la ausencia de presencia afectiva de este padre, que suele ser un elemento importante que hubiera rescatado al chico del monopolio materno.
Así el padre de Howard lo abandonó cuando este era aún niño, con 11 años. De Sheldon y Leonard no sabemos nada de sus padres o muy poco. Únicamente Rajesh tiene padre y madre, pero mantiene con ellos una relación virtual y muy infantilizada, dada la distancia de su país.
El logro de la independencia de los padres y otras figuras familiares es un largo y complejo proceso que trascurre en distintas etapas a lo largo de la infancia y la adolescencia, lográndose progresivamente mayores niveles de autonomía e identidad.
No obstante en gran parte de los casos esta desvinculación sólo se logra parcialmente, pudiendo obstaculizarse o no promoverse por muchos motivos, carencias afectivas, traumas… etc , y dada la gran complejidad y delicadeza que precisa el desarrollo psicológico humano. A través de la Psicoterapia es posible reparar esos traumas o fijaciones, compensar carencias y lograr la identidad deseada.